Se pidieron tres churracos y lo sirvieron con un olor a fuerte (como a podrido) Y nos dijeron que la probaremos para saber si estaba buena (ellos ya sabían que la carne olía feo).Claramente la carne estaba dañada.Si saben que un plato está dañado no se lo sirvan al cliente.. eso es una falta de respeto y profesionalismo.
Lugar muy agradable