La calidad de los tapabocas, que en principio era muy buena, ha caído notoriamente. Es visible la falta de control en el proceso de producción en el que el usuario final del producto es el gran perjudicado. Las tirillas de ajuste no se están centrando, afectando la ergonomía y capacidad de cierre del tapaboca sobre la nariz. Mejoren, no basta con producir. Ustedes pueden lograrlo!