Terrible. Vivir en este edificio es horrible. Los propietarios del 402 son personas que ponen reggaeton y vallenatos a un volumen demasiado alto. Todo el tiempo hablan fuerte y tienen reuniones con amigos, por lo que no se puede descansar, ni trabajar o estudiar porque todo el tiempo se escuchan ruidos de ese apartamento. Este edificio no es para personas tranquilas.