La primera impresión que uno se lleva al ingresar a ese lugar es que la mala atención de los empleados que ni siquiera determinan ni responden al saludo del cliente que llega es típico del importaculismo. Lo otro es que no prestan el servicio de corte de la madera a sabiendas que las unidades que allí venden son de 3,96 metros de largo y constituyen carga larga para cualquier vehículo.
Tienen buenos productos pero les falta servicio y atención. Me dejaron con el saludo y no me pusieron cuidado cuando hablaba. Muy mal.
No cuenta con la prestación de servicios básicos, por ejemplo la perforación para puertas e instalación de canto rígido
Todos los materiales los encontre muy buena